Las canciones de Bilitis 

  Con todo sombrero de paja. florecitas y canciones, se nos presenta el anhelado verano en las campañas de marcas y pasarelas en todo el mundo.  Recreando la estereotipada imagen romántica, de nuevo hippie y bohemia, recupera a mi gusto el carácter narcótico y difuso de la adaptación cinematográfica del fotógrafo David Hamilton -1976-, de los poemas eróticos Bilitis de Pierre Louÿs, así luce el difuso y húmedo verano. 

  Dice wiki que los versos que dieron origen a la película, fueron publicados por primera vez en Paris en 1894. El libro se presentó como una presunta traducción de Louÿs de la obra de una poetisa de la antigua Grecia, Bilitis, que habría vivido en la isla de Lesbos en el Siglo VI a. C. Como su contemporánea Safo, Bilitis escribía poemas sensuales y apasionados en los que habla fundamentalmente de amor entre mujeres.  Una épica al inicio contaba la vida de Bilitis, venían los poemas traducidos por un supuesto arqueólogo alemán y terminaba, con una serie de “no traducidos” que le redoblaron valor bien particular de la edición.  Pues todo era un fraude y se demostró que el mismísimo  Louÿs, era el autor.

  David Hamilton -Londres 1933-  es un prestigioso fotógrafo que dedicó gran parte de su carrera a un tipo de fotografía sensual, erótica, serena y luminosa, con un estilo característico en el que predominan los colores suaves y el grano grueso. En "Bilitis" lleva su estilo al cine contando historias del verano entre chicas, empleando su efecto fog –neblina, difuso- donde logra momentos poéticos, entre escenas eróticas que a veces ni siquiera llegan al soft porn, que refrescaron una década intensa post hipismo, orgias en Goa y crisis petrolera.  Los artesanos y artistas en los 70s  redescubrían en las urbes el folk, alimentando la nostalgia de pioneras e inmigrantes con sus batas interiores de humilde liencillo de algodón.  Ricamente decoradas con bordados, randas, alforzas y ojalillo, esta prendas son una muestra del “arte povera” mas ennoblecedor.

  Las hijas de Bilitis, otro titulo de la serie de Louÿs ya había sido desde el 55 el nombre la primera asociación presbiteriana y lesbiana estadunidense y fue evidente la visibilidad que el mundo lésbico logro a través de esta exaltación a la libertad de las francesas con fondos del traslucido mediterráneo que al mainstream americano Hamilton presento.  Coronas de flores frescas de campiña sobre la melena salvaje, vestidos tejidos en hilo, enaguas retro y vintage. Gasa, seda y tul de blanco, rosa y gris perla, creando los diseños más románticos, son un estereotipo bien reconocido en el mundo L.

  Este verano, un camisón blanco con diseños de lencería o étnicos, un pijama de hombre viejo y XXL pueden ser minivestidos y si algunx es romántica, con volantes y ruffles obtiene una apariencia más naïf. Dicen los blogs “vuelven a ser un must de las noches de verano”.

Octubre 2011